domingo, 4 de diciembre de 2011

"Cash" (Dinero en efectivo) Luna, su "Unción": Segunda Parte

Centro Rey

Los falsos maestros que se mueven en el mundo evangélico - como no puede ser de otra manera - usan desembarazadamente el nombre de Cristo, y de esta manera confunden a muchos cristianos, muy ingenuos, que esperarían que los falsos maestros, en todo caso, hablaran abiertamente o bien en contra de Cristo, o exaltando a algún dios pagano. ¡Nada de eso ocurre ni ocurrirá, sino todo lo contrario, y ahí radica el grado tan peligroso de engaño precisamente!

Carlos, alias Cash, Luna, maneja sin ningún complejo ni escrúpulo conceptos cristianos, y por eso tantos son confundidos porque llegan a pensar que, ¡cómo puede un hombre así ser un falso maestro cuando habla de Dios, de Jesús, del Espíritu Santo, de la Biblia!

El jefe del Vaticano, usa también la misma terminología, y sin embargo es el principal del falso cristianismo. Es el jefe visible de la Gran Ramera (Ap. 17). No es de extrañar, por tanto, que sus hijos, sean del lado católico o del lado protestante, etc. sigan sus mismos pasos, orquestados todos por un mismo espíritu.

Insisto en este punto. El mayor engaño es el que se parece mucho a la verdad, pero es una perversión de la misma. No se puede engañar sólo con mentiras.

El espíritu aludido, es el del Falso Profeta que está trabajando por la unidad de todas las religiones, preparando el camino al Anticristo. Por eso jamás verán que, ni Luna, ni Hinn, ni Castellanos, ni Wagner, ni Graham, ni ningún pequeño avatar pseudo evangélico hable la verdad sobre el catolicismo romano.

Dicho esto, prosigo en esta misma línea de pensamiento.

“El anterior jefe del Vaticano besando el Corán, en preparación para la unión de las religiones”

“El actual jefe del Vaticano haciendo los cuernos

Cash Luna

Anton La Vey, el creador de la Iglesia Satánica

1. Un espíritu que no es el Espíritu

“Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo” (1 Juan 4: 1)

Cash Luna, en defensa de su concepto de cómo es el Espíritu Santo en cuanto a su particular y circense manifestación (no la del bendito Espíritu Santo, sino según su interesada interpretación), narra en su libro “En honor del Espíritu Santo” toda una disertación que no hace sino ponernos los pelos de punta.

Siempre basándose en sus particulares y santurrónidas experiencias, dice que una noche se despertó gimiendo, y que el Espíritu Santo le habló y le dijo: “Donde quiera que vayas, dile a mi gente que les amo como son, con sus virtudes, fortalezas, defectos y debilidades…quiero que les digas que me acepten como soy, no como pretenden que sea, porque no puedo negar quién soy” (1)

El contexto, como veremos al rato, tiene que ver con esas manifestaciones de metafísica, desorden y de circo, que contradicen la misma Palabra de Dios (1 Corintios 14: 23; 32, 33, 39, 40)

Pero antes, me voy a detener a analizar esas supuestas revelaciones, supongo que audibles (¿?) que Luna dice recibir mientras gemía a las tres de la madrugada habiéndose despertado de repente (2). Veamos:

a) Acepta Dios mi pecado?:

“Donde quiera que vayas, dile a mi gente que les amo como son, con sus virtudes, fortalezas, defectos y debilidades…”:

De nuevo Cash Luna es un enviado directo de Dios para hablarle a Su pueblo; tipo de actuación propia del catolicismo romano.

Por otra parte, esta es una muy generalizada manera de describir algo que raya la mentira. Últimamente es muy común enfatizar el amor de Dios por encima del pecado. ¡Cuidado! Esa frase: “Dios aborrece el pecado pero ama al pecador”, no viene en la Biblia como tal. Es cierto que Dios ama a sus hijos, como no puede ser de otra manera; incluso amó al mundo (Jn. 3: 16), pero frases como la que dice Luna que Dios le dijo, son muy peligrosas (y por tanto no son de Dios), ya que favorecen el entendimiento de que “pues no importa lo que hagas, Dios te ama igual”. Esta es una sutil manera de convertir la gracia de Dios en libertinaje (Judas 4)

No, sinceramente, no creo que Dios me ame como yo soy en la carne. Como verdadero creyente, la única razón por la cual me sostengo en pie, y voy camino a la manifestación de la salvación adquirida por Él, es porque me cubre la justicia del Hijo, por haber sido yo rociado con Su sangre (Ro. 3: 25, 1 Pr. 1: 2) Si no fuera por esa justicia, Dios me detestaría.

Por eso, la gente que no tiene a Cristo y muere, va al infierno.

b) ¿Hablaría así Dios?:

“…quiero que les digas que me acepten como soy, no como pretenden que sea, porque no puedo negar quién soy”:

Aquí vemos al “Espíritu Santo” mendigando un poco de amor y aceptación, según Luna.

El Espíritu Santo es Dios… ¿Hablaría así Dios? No creo que siquiera se nos pasara por la mente el cuestionarnos que Dios nos tuviera que pedir que le aceptemos tal como Él es, y no como nos “gustaría” que fuera. Eso es ridículo.

Por otro lado, tampoco nos podemos imaginar a Dios diciendo: “No puedo negar quién soy”; sencillamente, eso no tiene ningún sentido. Entonces, ¿Por qué sí en cuanto a la Persona del Espíritu Santo, según Luna?

Cash Luna nos traslada aquí un extraño y humillante concepto de quién es y cómo es el bendito Espíritu Santo, que nada, ¡Nada! tiene que ver con la revelación bíblica, y todo por pretender defender su particular pista de circo de la cual vive, y vive muy bien.

A. Descripciones de Luna

Al respecto y a renglón seguido, Luna escribe:

“Entonces vinieron a mi cabeza imágenes de reuniones en las que he ministrado. Vi al Espíritu Santo acercándose a una persona que no aguantaba semejante presencia y se quebrantaba llorando. Luego lo vi acercándose a otra persona que simplemente reía a carcajadas porque un gozo sobrenatural la inundaba. Otro temblaba al no tolerar ese gran poder. Y mientras él se acercaba a la gente, los cuerpos reaccionaban ante su poder. Otros, en la misma reunión, se incomodaban y molestaban juzgando esas manifestaciones. Luego sentí que él me miraba y con su expresión me decía: “Qué quieren que haga! Así soy yo” (3)

De nuevo, paso a analizar esta pseudo teológica disertación de Luna:

“Entonces vinieron a mi cabeza imágenes de reuniones en las que he ministrado…”:

En ese momento, sentado en su cama, en medio de un extasiado arrebato (típico estilo jesuita), Luna dice que recuerda imágenes de sus reuniones. Vemos que sutilmente intenta convencernos de que el Espíritu Santo está en sus intervenciones circenses; en su manido, casi perenne: “Ciao”.

Vi al Espíritu Santo acercándose a una persona que no aguantaba semejante presencia y se quebrantaba llorando….:

¡¡Cash Luna vio al Espíritu Santo!! … ¡Si ya es difícil, si no imposible ver a un simple ángel, imagínese ver al bendito Espíritu Santo!... pero claro Cash Luna es un muy “ungido” que tiene esa prerrogativa de parte del Altísimo, o al menos, eso mismo es lo que con mucha sutilidad nos viene a trasladar.

Dice que el Espíritu Santo se acercó a una persona. Entiendo que esa persona era creyente y por tanto tenía el Espíritu Santo, sin embargo según Luna, eso no era así. Era por imposición suya que el bendito Espíritu de Dios se acercó a dicha persona. Sin embargo no lo toleró porque no aguantaba su presencia… En ninguna parte del NT encontramos que haya un creyente que “no aguante la presencia del Espíritu Santo”, ¡sino todo lo contrario, ya que la misma Palabra nos enseña que somos templo del Espíritu Santo! (1 Co. 6: 19)

“…Luego lo vi acercándose a otra persona que simplemente reía a carcajadas porque un gozo sobrenatural la inundaba…”:

De nuevo Cash Luna, el súper “ungido”, ¡puede ver al Espíritu Santo!...

Esta vez según Luna, el Espíritu Santo “se acercó” a una persona que reía a carcajadas (risa santa). Veamos, no está muy claro el asunto aquí. ¿Se acercó el Espíritu Santo para ver cómo reía a carcajadas esa persona? ¿Actuó como espectador el Espíritu Santo? Digo esto porque cuando se “acercara” el Espíritu de Dios, esa persona ya estaba riéndose, a carcajadas.

“…Otro temblaba al no tolerar ese gran poder…”:

La Biblia no dice que el Espíritu Santo se “acerca” al creyente. La Biblia dice que al ser templos del Espíritu Santo como verdaderos creyentes, estamos llenos del bendito Espíritu, y debemos ser llenos de Él (nótese Él con mayúscula, no en minúscula como lo escribe Luna) (1 Co. 6: 19; Ef. 5: 18b)

¿Se imagina usted, querido hermano, siempre temblando por no tolerar Su poder, siendo como es usted, si lo es, templo Suyo? ¡¡¡Sería un infierno!!!... y, ¿por qué sólo ocurre esto (cuando es el caso) cuando “ministran” tipos como Cash Luna y él mismo? ¿Será que esa impartición es la del bendito Espíritu Santo?...

Les paso el siguiente vídeo, donde podrán observar que el diablo sabe como tumbar a la gente al suelo por el poder, en este caso de la hipnosis:

http://www.youtube.com/watch?v=rE7at0fvU-U&feature=related


La hipnosis funciona en aquellas personas que tienen el deseo profundo de experimentar lo sobrenatural, abandonando su voluntad al que les “ministra”. Esto NADA tiene que ver con el Evangelio, sino con la metafísica, con el ocultismo.

El diablo sabe como disfrazarse como ángel de luz para engañar (2 Co. 11: 14); no obstante muchos son simplemente llevados por las manifestaciones de poder o similares, y así sucumben al engaño (Mt. 24: 24)

Hay demasiados creyentes sumamente ingenuos e ignorantes que se prestan a ser tumbados por el “ministro” de turno, tipo Cash, y que encima creen que ha sido el Espíritu Santo, que siempre se tiene que “acercar” a ellos.

“…Y mientras él se acercaba a la gente, los cuerpos reaccionaban ante su poder…”:

Aquí Luna está diciendo que el creyente no tiene control sobre su cuerpo, cuando el espíritu (ya no diré más aquí Espíritu Santo) se “acerca”. ¡Huya usted de esto!

Estas manifestaciones y esta enseñanza Lunera, desposeída de toda teología y con mucho despropósito, nos recuerda al Montanismo defendido por aquel Orígenes. Nada que ver con la enseñanza bíblica, que es la única que vale, aunque a veces no sea tan espectacular.

Ser llenos del Espíritu Santo es mandato bíblico, y nada tiene que ver con el circo que se forma en muchas congregaciones, congresos como los de Luna, etc. viendo a la gente cayendo y revolcándose en el suelo como si fueran borrachos o locos, lo cual es piedra de tropiezo para la gente que tiene un mínimo de verdadero sentido común.

Luna compara ese ser “lleno” del Espíritu Santo suyo con la experiencia de los primeros discípulos de Cristo (4). ¡Nada más lejos de la realidad! Los primeros discípulos experimentaron el bautismo y llenura del Espíritu Santo, y lo manifestaron hablando en otras lenguas, en las lenguas de aquellos judíos que vivían en otras partes del imperio romano, y que habían venido a Jerusalén, a la fiesta de Pentecostés, a adorar (Hchs. 2: 8-10). Al conocer que eran galileos los que hablaban en sus lenguas, se quedaron atónitos, al tiempo que los judíos de Jerusalén, al no entender esas lenguas, pensaban que estaban como tontos o borrachos, ya que alababan a Dios en voz alta… ¡¡¡NADA QUE VER CON CAÍDAS, REVOLCONES, RISA SANTA, RUIDOS DE ANIMALES y demás sandeces neo montanistas, propias de la hipnosis y del kundalini hindú!!!

En la contraportada de su libro, leemos lo siguiente: “El Espíritu Santo descendió como paloma sobre Jesús, pero no es una paloma. Apareció como llamas sobre la cabeza de los discípulos, pero no es fuego. Embriaga como vino pero no es vino…” (5)

Cash Luna se esfuerza en que compremos su idea o concepto de su “espíritu santo”, pero no lo vamos a hacer. El bendito Espíritu Santo NO EMBRIAGA como vino. Ni siquiera embriaga.

Una persona embriagada no es dueña de sus actos. Es llevada por demonios. Por eso la Biblia prohíbe que nos embriaguemos, en cualquier manera. ¡¡Jamás el Espíritu Santo hará algo contrario a lo declarado en la Escritura!! Dios no se contradice nunca.

2. Más experiencias extrañas y metafísicas de Luna

Carlos Luna, o es muy fantasioso, o miente descaradamente pretendiendo elevarse por encima del resto de los creyentes. En su libro de marras, en la página 57, escribe:

“También existe una especie de vientre espiritual para quienes son formados espiritualmente. Cuando el Señor nos recomienda orar, dice que entremos a nuestro aposento y cerremos la puerta “porque en lo oculto nos va a formar”. Ese huerto de oración es como el vientre de nuestra madre…”(6)

Usando de un lenguaje propio de la metafísica, dice que el Señor nos quiere cambiar y mejorar. Ese “en lo oculto nos va a formar” seguramente parafraseando el salmo 139, aunque fuera de su contexto, nos produce cierta incertidumbre y preocupación. Lo que sugiere Luna es que los creyentes, nos encerremos en nosotros mismos, como aquellos místicos tipo Ignacio de Loyola que se escondían en las cuevas para tener comunión con Dios.

Todo esto nada tiene que ver con las palabras de Jesús, las cuales vemos ahora:

“Y cuando ores, no seas como los hipócritas; porque ellos aman el orar en pie en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos de los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa. 6 Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público. 7 Y orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles, que piensan que por su palabrería serán oídos” (Mateo 6: 5-7)

Jesús enseñó que no debíamos orar para que nos vieran los demás, exhibiéndonos como especiales o “ungidos” como hace Luna por cierto, sino que oráramos, no para ser vistos de los demás sino sólo por Dios.

Nada que ver con estar en “oculto”, ni estar en un “vientre espiritual”, o estar “como en el vientre de nuestra madre”, ¡Por Dios!

Ahora bien, el proceder de ese modo, inevitablemente lleva a uno el ser engañado por los demonios, tal y como le ocurrió al padre del Jesuitismo, Ignacio de Loyola, que recibió la “revelación” vía “espíritus de luz” de lo que serían los “Ejercicios Espirituales”.

Por supuesto, Luna no se queda atrás, y nos narra en su mencionado libro, lo siguiente:

“En otra ocasión estaba en la sala…cuando de pronto vi una silueta frente a mí y sentí su presencia. Me habló y me ordenó que comprara el terreno donde construimos el primer templo propio. De inmediato desapareció…”(7)

Yo no sé si esa experiencia que cuenta fue real o no, ya que la mentira y la exageración abundan; pero si fue real; ¿Quién nos asegura que esa “silueta” no fuera un demonio? No veo declaración en la Biblia de que alguno de los ángeles de Dios se mostrara como una silueta. No obstante para Luna tal y como lo cuenta vienen a ser como algo normal y habitual esas experiencias en su cotidianidad.

Luna, una vez más, nos muestra su peculiaridad. El es único, sólo comparable a los místicos del pasado y del presente, tipo Castellanos, Hinn, etc. etc. Todos ellos cortados por el mismo patrón. Todos ellos agentes del Vaticano.

“Este es el nuevo jet privado de Cash Luna, un Westwind; indispensable para desplazarse para servir al señor, como no podría ser de otra manera para un hombre que en el nombre de jesús ha amontonado hasta la fecha mucho más que ese dinero que se requiere para la adquisición de esa monada aérea”

3. Concluyendo

A lo largo de la lectura de su libro, Luna se pone en evidencia, como siempre. Usando de mucha verdad, introduce su mentira, de modo que un poco de leudo, leuda toda la masa. Ese es el engendro típico del engaño.

Seguramente la lectura de ese libro dará mucho más de sí, y seguramente seguiremos escribiendo al respecto, aunque a algunos, como lo sé, les pese.

Dios les bendiga.

© Miguel Rosell Carrillo

Fuente: http://www.centrorey.org/

..........................................................................................................................................

Iglesia: Despierta!

Que hace falta para que la Iglesia se despierte y denuncie a Cash Luna y toda la corriente Satánica al estilo Benny Hinn?, corriente que proviene de lo mas Satánico del Vaticano, es decir proviene del mismo infierno!

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...