Hugo Guerra
"Pues conocemos al que dijo: Mía es la venganza, yo daré el pago, dice el Señor. Y otra vez: El Señor juzgara a su pueblo" Heb 10:30
El capítulo 10 de Hebreos, ha sido tan mal interpretado (incluso por Calvinistas).
A quien va dirigido este fuerte juicio? . El contexto nos dice que la carta fue escrita para alentar a los genuinos creyentes que habían salido de las sinagogas judías a la reunión o congregación de los santos.
El verso 26 del cap 10 comienza con una descripción de aquellos que estaban abandonando la " asamblea de Cristo " (el escritor les dice que para ellos ya no hay mas sacrificio sino solo una horrible expectación de hervor de fuego) , el punto es ¿Por que razón estaban dejando de congregarse? (definitivamente) y ¿Que acción estaban llevando acabo al abandonar el cristianismo ?.
Algunos de los Hebreos que habían salido del Judaísmo, estaban dentro de la "comunidad del Pacto", por esta razón, ellos al igual que los genuinos creyentes eran considerados como (santificados / apartados), pero la presión de los judíos incrédulos era tan fuerte que estaban llevando a cabo todo tipo de persecuciones y presiones para que los que habían salido del servicio del culto Levítico, volvieran a el.
La única opción que tenían ellos era renunciar "públicamente" de Cristo y de su Iglesia y por esto, ellos volverían a su vida normal y se les devolvería incluso sus bienes personales.
La formula de renuncia era esta:
1. Pisotear al Hijo de Dios.
2 .Tener por inmunda la sangre del Pacto (en la cual fue santificado o ratificado el Pacto)
3 . Hacer afrenta al Espíritu de Gracia.
El escritor relaciona este horrendo pecado con uno que se realizaba dentro del Antiguo Testamento (dentro de las transgresiones en el Antiguo Pacto, solo algunas eran dignas de muerte y sola algunas eran catalogadas por la Ley como abierta APOSTASÍA).
El autor de la carta sabe muy bien que el pecado de los judíos que abandonaban la asamblea y blasfemaban de Cristo era sin duda alguna un pecado de "apostasía" que en el Antiguo Pacto, era castigada con la muerte física, pero bajo el régimen del Nuevo Pacto, la apostasía, llevaba en si una pena mucho mas dura en razón del valor del sacrificio de expiación. Es decir, la muerte eterna.
Es por esto que el autor cita Deuteronomio 17:2-7 en donde se dice que [Los violadores del Pacto] que "ADORANDO dioses AJENOS " debían morir irremisiblemente.
Los apostatas al volver al judaísmo, hacían violencia al "PUEBLO DE DIOS" es decir, a la Iglesia (logremos imaginar que dentro de una Iglesia local algunos "aparentes hermanos" comiencen a maldecir a Cristo y a su pueblo ) ¿No traerá ciertamente la ira de Dios sobre aquellos?.
Evidentemente que si.
El señor les anima a los genuinos creyentes que soporten porque "MÍA ES LA VENGANZA, YO DARÉ EL PAGO, Y EL SEÑOR JUZGARÁ A SU IGLESIA", este es el sentido aquí. No se trata por tanto que aquellos que maldecían y cometían apostasía sean llamados *Su Pueblo*.
El escritor nuevamente recurre al Antiguo Pacto para describir como Dios hará justicia a su nombre y pueblo (Iglesia) mancillada.
El pasaje que cita se encuentra en Deuteronomio 32:35-36 en donde Moisés escribe como Dios promete que "vengara" las cosas malas hechas a su pueblo" (Calvino).
Así pues no hay argumentos de aquellos que pensando que los genuinos creyentes pueden apostatar y perder la salvación, puedan levantar ignominias contra la sana doctrina de la preservación de los creyentes. Estamos asegurados para siempre porque con una sola ofrenda nos hizo perfectos (esto es; limpios) para siempre a los santificados por la Sangre de Su Hijo.
Fuente: https://www.facebook.com/logos.arkhe.9/posts/389617388077041?comment_id=389888071383306&ref=notif¬if_t=feed_comment_reply¬if_id=1491655363423272
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