Daniel Pastore
Algunos creyendo encontrar argumentos que les den fundamentos para rechazar ciertas verdades que les incomodan, lo que en verdad han encontrado no son argumentos Bíblicos, sino una pila de falacias. Falacias que las expresan en una retórica que los embriaga en una sensación de que han encontrado la forma de deshacerse de dichas verdades.
Se trata de una embriaguez de la que probablemente nunca se llega despertar mientras dura esta vida. Algunos despertaran de esa embriaguez cuando después de dejar esta vida tengan que dar cuenta en el Tribunal de Cristo por la madera el heno y la hojarasca con que edificaron su trabajo en la obra, pero otros despertaran de esa embriaguez en el mismo infierno porque se trató de hombres naturales.
Un ejemplo de esto es el de aquellos que ante la exposición de las doctrinas de la gracia, exposición en la que a lo único que se ha apelado es a la sola Escritura, tratan por todos los medios de desviar el eje de la atención tratando de probar que quienes enseñamos las doctrinas de la gracia estamos enseñando filosofías humanas, o como dicen ellos las doctrinas de Calvino. Estos individuos no se percatan de que lo que en verdad están resistiendo es a verdades enseñadas Por El mismo Señor en su Palabra;
FUE EL SEÑOR JESÚS EL QUE ENSEÑO LA DOCTRINA DE LA ELECCIÓN.
Juan15:16 No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé.
FUE EL SEÑOR JESÚS EL QUE ENSEÑO LA GRACIA SOBERANA:
Mat 11:27 Todas las cosas me fueron entregadas por mi Padre; y nadie conoce al Hijo, sino el Padre, ni al Padre conoce alguno, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo lo quiera revelar.
Juan 5:21 Porque como el Padre levanta a los muertos, y les da vida, así también el Hijo a los que quiere da vida.
FUE EL SEÑOR JESÚS EL QUE ENSEÑO LA GRACIA IRRESISTIBLE:
Juan 6:44 Ninguno puede venir a mí, si el Padre que me envió no le trajere; y yo le resucitaré en el día postrero.
Juan6:37 Todo lo que el Padre me da, vendrá a mí; y al que a mí viene, no le echo fuera.
FUE EL SEÑOR JESÚS EL QUE ENSEÑO LA PERSEVERANCIA FINAL DE LOS REDIMIDOS.
Juan 6:39 Y esta es la voluntad del Padre, el que me envió: Que de todo lo que me diere, no pierda yo nada, sino que lo resucite en el día postrero
Juan10:27 Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen,
Juan 10:28 y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano.
Juan 10:29 Mi Padre que me las dio, es mayor que todos, y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre.
Juan 10:30 Yo y el Padre uno somos.